👋🏻Hola!
Hoy te voy a contar cómo hace 4 años iniciaba la nueva aventura de nuestro negocio, cuando por fin nacía RAINBOW, después de muchos meses de pensar, analizar y darle vueltas a todo..
Desde que abrimos el local de la calle Independencia al 66 quisimos estar en la avenida de la ciudad..
Aquí en Alvear, la mayoría de los comerciantes soñamos con tener un lugar en la avenida principal, y a nosotros nos costo 11 años de espera…
Siempre estuvimos atentos a ver si se desocupaba algún local.. pero siempre pasaba algo: O llegábamos tarde😟, o era muy caro😕, o no era un buen momento económico😔.. o.. o.. o.. siempre había impedimentos..
A mediados del 2021, apenas saliendo de la pandemia.. y apenas resurgiendo un poco el movimiento.. fuimos a ver un local, pero no era una muy buena ubicación.. y eso quedo dando vueltas en mi cabeza.. El cambio ya había empezado y no lo sabíamos..
Tan solo un par de meses después, un día al mediodía volviendo a casa, encontré un local que vendía ropa con cartel de SE ALQUILA, obviamente me volví loca, no voy a negarlo.😅
Ese mismo día llame a la inmobiliaria, y en cuanto el local estuvo desocupado fuimos a verlo; si bien era un poco mas chico que donde estábamos.. ME ENCANTO!🤩
Llegué a la librería y empecé a medir muebles y a anotar en una libreta, a hacer cálculos mentales para ver como íbamos a hacer para mover millones de cosas.
Si te mudaste 2 o 3 veces en tu vida.. podes tener una idea de lo que significa.. bueno, eso multiplícalo x10😂
Al principio empezamos a embalar las cosas todas ordenadas, clasificadas y con etiquetas, pero ya a ultimo momento, a contrarreloj fue un desmadre.. todo mezclado; así es como todavía abrimos una caja que quedo oculta y aparecen cosas que no sabíamos que estaban.
Trabajamos incontable cantidad de horas en el local nuevo y en el viejo.. los primeros días después de abrir íbamos y veníamos a las corridas a buscar cosas que aún no habíamos trasladado..
Cada 12 de octubre, recuerdo el cansancio que sentí aquel primer día de RAINBOW, después de haber estado casi 18 horas sin parar el día anterior y tener que ir a trabajar con una sonrisa aunque solo quería dormir.
Bueno.. en fin.. fue la peor mudanza de mi vida, pero el mejor cambio.
Hubo un momento de desquicio preapertura en el que levemente me arrepentí de todo, en el que creí que no llegábamos a tiempo, lloré, grité, solté algunos insultos; y eso fue suficiente para liberar el estrés acumulado.. y seguir para adelante..
Hoy ya no me arrepiento de nada.
Hoy me alegro de haber tenido el valor de enfrentar a mis padres que no querían mudarse por miedo.
Hoy me rio de haber peleado con mi novio que me ayudo a instalar todo lo que ves en el local.
Porque eso no era más miedo por lo nuevo que venía.. pero sin dar el paso que da miedo no se puede avanzar!
Gracias a todos los que nos acompañaron en aquel momento, y a todos los que nos eligen a diario!
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